LAPLAND (II)
Nos despertamos con resaca (yo con muchísima resaca) sobre las 10am, que es cuando amanecía por esas latitudes. A la mañana descubrimos que Ary había vomitado en la cama mientras dormía con Erik, lo cual al descubrirlo por la mañana fue un poco desagradable, ..., arrggg!!!
Nos duchamos, vestimos y fuimos todos a desayunar al cuarto de Valentina. Luego nos reunimos en el hall del Motel a las 12am. Preguntamos por autobuses a Rovaniemi, pero en fin de semana no había muchos servicios, así que decidimos llamar a taxis, que más o menos salía igual de precio, y así íbamos directamente a Santa Claus Village, la residencia oficial de Papa Noel!!
Nos plantamos allí, y como buen turista que se precie, cámara en mano nos pusimos a hacer fotos, muchas fotos, ..., estúpidas fotos. Santa Claus Village es un sitio donde siempre es navidad y donde Papa Noel tiene muchas tiendas donde los turistas aportan el dinero necesario para sufragar los vicios que este señor pueda tener.
Lo bueno del sitio es que está sogre el mismísimo círculo polar ártico, así que con mi sudadera de South Pole daba un poco el cante, jajaja!!! Lo malo es que no se porqué, pero olia fatal ese día. Mama Noel debió haber cocinado fabada el día anterior. Eso o a los renos no les alimentaban apropiadamente, jajaja!!!
Después de hacer mucha cola, a las 2:30pm Papa Noel tenía que comer, así que cogimos turno para por la tarde. En la cola estaban unos italianos de Milán (no eran terrones pero lo parecían) que se comportaron muy mal colándose. Este fue el primero de nuestros encuentros.
"South Pole"
Después de hacer compras impulsivas fuimos a ver a Santa Claus. Tuvimos que esperar poco. Papa Noel es un tío agradable, simpático que debe tener una paciencia infinita, porque aguantar a tanta gente, ..., ufff!! Nos hicimos una foto de grupo con él por el módico precio de 6€. Yo me la hice con Erik, Valentina, Lisa y Chiara. Nos quedó muy bien.
Después de las fotos fuimos desesperadamente a comer algo, y luego las Pojakas, Erik, Sven y yo nos marchamos antes en Taxi para comprar la cena y el desayuno del día siguiente. Aquí tuvimos el segundo encontronazo con los italianos, ..., nos robaron el taxi!!! Malditos italianinis!!! Tuvimos que esperar media hora hasta que vino otro taxi.
Una vez en el centro de Rovaniemi compramos comida. Yo estaba supercansado. No me tenía en pié por la resaca que todavía me duraba, jeje!! Pero weno. Como al día siguiente estaba planeado ir a Ranua, a un zoo que hay de laponia, decidimos ir a la estación de autobús para ver horarios y tal. La verdad es que eran un poco malos, y ya en Santa Claus Village dejé caer que ir al zoo era un poco una mala idea. Esperamos durante una hora y media a otro taxi. Nos dio tiempo a conocer a más españoles que andaban de visita por allí. Al final cogimos uno y nos fuimos a descansar al Motel, que buena falta nos hacía. Después, a dormir algo, un poco de sauna y a habla sobre mañana mientras cenábamos. Yo recuerdo que me quedé durmiendo más y todo el tiempo andaban preguntando por mi. Estaban todos en la habitación de las Pojakas y Marta.
"Rocky Balboa"
Cuando desperté de mi letanía, fui allí medio dormido. Cené algo y nada, a beber que de eso se tratan estos viajes, jejeje!! Mientras se decidió no ir a Ranua y en vez de eso visitaríamos el museo Artikum (uno de los más importantes del país) y veríamos el centro de Rovaniemi.
"Lisa muy atenta"
"Jugando al Jungle Speed"
"Escribiendo dedicatorias en las fotos de Santa Claus"
"Folladas en grupo"
"El cigarro de después de ..."
"Bailando sobre la mesa"
Bebiendo y bailando y firmando las fotos de Santa Claus se nos fue la noche. Cuando eran las 3 o así me fui a dormir con Lisa, otra vez, que quería continuar la conversación que habíamos tenido el día anterior. En un principio íbamos a dormir en su habitación, pero cual fue nuestra sorpresa que la habitación estaba destrozada. Más tarde nos enteraríamos que los italianinis, como no, habían pensado en desordenar la habitación de Lisa, Ary y Tamara porque era la que nunca se utilizaba. Al final participó todo el mundo en el destrozo que les quedó como una obra de arte.
Lisa y yo nos fuimos a dormir a mi cuarto y continuamos la conversación. Cuando los otros se cansaron de la fiesta vinieron al cuarto a dormir pero Lisa por supuesto estaba tan enfadada que no les dejó entrar. Estuvieron llamando a la puerta y picando en el cristal un buen rato, pero no hicimos caso. Al final los chicos durmieron con las pojakas y Marta y Lisa y yo en mi cuarto.
---------------9 de Diciembre-----------------
Otra vez a levantarnos a las 10 y eso que habíamos quedado a las 9, esta vez con menos resaca que antes. Fuimos a desayunar al cuarto de las Pojakas donde ya estaban todos. Ary y Tamara no se habían enterado del desorden en su cuarto. Cuando se lo dijimos se pillaron un mosqueo grande, pero luego se les pasó. Los que habían hecho el desastre lo arreglaron y al final todos en paz.
"Duro despertar"
Nos reunimos todos a las 12 en el hall de nuevo después de recoger todo y hacer nuestro equipaje. Cogimos unos taxis hasta el centro de Rovaniemi y dejamos todo el equipaje en las consignas de la estación de tren. Mientras comprábamos los billetes de Rovaniemi a Oulu que eran los que nos faltaban para hacer la conexión y el viaje completo de vuelta.
Una vez listos, a caminar al museo Artikum. El Artikum lo ponen en las guias como un museo super importante que no hay que perdese, pero bueno, Finlandia es un país joven, y le dan mucha importancia a lo poco que tienen. La verdad que el museo me gustó a pesar de los 8€ que costaba entrar. Es un museo muy interactivo de tocar y probar cosas y eso esta muy bien.
Pasado el museo, a las 3 o así nos entró un hambre increíble, y decidimos ir a comer al primer sitio que nos encontrásemos, el que sirviese la comida más rápidamente, ..., McDONALDS!!!! Y...¿quién estaba en el McDonalds?, otra vez los malditos italianos de Santa Claus Village. Por suerte ya estábamos comiendo cuando ellos llegaron.
Por la tarde echamos tiempo viendo el centro de Rovaniemi, que no tenía mucho que ver, un mercadillo de Navidad y poco más. Nos metimos en un bar y echamos unas partidas de billar. A las 9 ya estábamos en la estación de tren listos para partir. El trayecto de vuelta fue muy tumultuoso con muchos cambios de tren (3 cambios para coger 4 trenes) aunque nos reímos y nos lo pasamos bien. Al día siguiente llegamos a Joensuu a las 11:45, destrozados pero dispuestos a ir a una fiesta por el cumpleaños de Valentina, Stefan, y más gente. Demasiada vida social!!!